Las microcarillas de porcelana constituyen uno de los tratamientos de estética dental más exitosos en la odontología actual. Se tratan de finísimas láminas de porcelana que se adhieren a la superficie del diente y corrigen imperfecciones en cuanto a la posición, color y forma de la pieza. Todo ello sin necesidad de tallar o provocar algún tipo de desgaste en el esmalte original.
En qué consiste el tratamiento de microcarillas
Este tratamiento estético es una solución muy poco invasiva con los tejidos dentarios. Es esencial conseguir un ajuste total de la carilla dental al diente y encía del paciente para garantizar un perfecto acabado y la durabilidad de las mismas. Previamente, para configurar el molde se liman levemente las piezas dentales en su parte delantera. Finalmente se coloca la carilla, culminando un proceso completamente indoloro.
Por qué de porcelana
Existen dos características principales por las que la porcelana es el material ideal para la reconstrucción dentaria: su similitud total con el esmalte dental y su dureza. Por un lado, el acabado estético de la porcelana provoca un resultado absolutamente natural. Por otro, al tratarse de un material de elevada dureza, ofrece una gran resistencia a la masticación.
Resultado del tratamiento
Las microcarillas son ultradelgadas, por lo no requieren el desgaste o tallado, de este modo se preserva la apariencia natural del diente. Su inocuidad se traduce en escasas molestias para el paciente. Incluso, ante posibles roturas de la carilla, siempre puede reemplazarse fácilmente por otra.
Su superficie, lisa y poco porosa, dificulta la adherencia de bacterias y permanece estable a lo largo de los años. Así, tu sonrisa puede lucir tan bonita, sana y natural como el primer día durante muchos, muchos años.
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