Uno de los pilares básicos de mantener una buena higiene bucodental es practicar una excelente técnica de cepillado. En nuestro día a día en la clínica vemos con frecuencia cómo muchos pacientes no tienen muy claro si lo están haciendo bien o si, por el contrario, están cometiendo errores que puedan comprometer su higiene dental. Por ello, en este post vamos a intentar explicar los errores más comunes a la hora de limpiarse los dientes.
– Lo más usual es no tener una técnica de cepillado depurada, lo que influye posteriormente en la higiene dental. Para hacerlo correctamente se debe elegir un cepillo de cerdas no excesivamente duras y seguir un orden adecuado: lo ideal es empezar por la mandíbula superior y por la cara exterior de las piezas dentales, para seguir con la interior y la superior.
– Olvidar la limpieza de la lengua es otro de los errores más comunes, pese a que haciéndolo nos encargamos de eliminar las bacterias que se alojan en ella, evitando también así la halitosis.
– El exceso de pasta de dientes puede crear una sensación de limpieza irreal debido a la cantidad de espuma generada. Recuerda: es suficiente con una cantidad del tamaño de un guisante.
– Muchas personas dan por finalizadas sus tareas de higiene una vez terminado el cepillado. Sin embargo, usar seda dental ayuda a eliminar los restos a los que el cepillo no puede llegar.